Silencio es ausencia,  de voz, palabras, respuestas, decisión, sentido, existencia, continuidad.

Silencio es presencia del cuerpo.

“Se trata apenas de eso: de mover aire a través de nosotros,
de que ese aire traiga algo del mundo y uno pueda devolver algo también”

Con esta frase contenida en el relato Los Ensayos, la escritora Alejandra Kamiya me explicaba poéticamente aquello que había estado haciendo compulsivamente todos estos días: soplar dentro de pequeñas botellas de plástico generando formas aleatorias con la sola presión del aire que salía de mis pulmones produciendo en la materia de-formaciones, corporeidades diversas, otredades y bultos sin rostro grabados seguramente en mi mente.

La forma adquiere significado cuando refiere a una época y a un contexto.

El aire, invisible y etéreo, adopta formas cambiantes, es espacio interior y espacio exterior.

Es el espacio que está entre los cuerpos, nos separa o nos une,
se transforma en testigo silencioso donde su forma adquiere significado al recordarnos que somos parte de un todo.