Exposición
Chile, Argentina, Brasil.
Inauguración: 19/08/2021

“POÉTICAS LATINOAMERICANAS...

La politización de la Joyería Contemporánea y su tránsito a dispositivo cultural”

Preguntarse por el arte latinoamericano en un mundo globalizado parece algo a destiempo, los artistas de los grandes circuitos hablan de un arte internacional y a las grandes figuras como Anish Kapoor, les molesta que se piense en su trabajo como “arte indio” o “arte inglés” y se entiende, los cruces culturales en su obra no se pueden circunscribir a una esfera territorial política tan limitada y esos límites no ayudan, necesariamente, a entender su trabajo. Hoy en día, para muchos creadores, el plantearse desde una perspectiva más local es visto como un freno a la creación y a sus carreras. Y es que los grandes centros culturales y políticos no se ubican en Latinoamérica, precisamente. En las artes visuales, lugares como Nueva York y Berlín son los centros donde se disputa el liderazgo. Si lo llevamos a la Joyería Contemporánea, claramente, Alemania lidera el circuito con la semana de la joyería y la famosa muestra Schmuck en Múnich. En general la Joyería Contemporánea mira a Europa como el lugar donde esta disciplina tiene su radio de acción, se siente viva.

LA IMPORTANCIA DE LA BIENAL LATINOAMERICANA DE JOYERÍA CONTEMPORÁNEA.

Las razones de mirar siempre a Europa o Estados Unidos son múltiples y complejas de analizar: un coleccionismo precario, la ausencia de instituciones especializadas, de escuelas de tradición, de teoría, de pensamiento crítico, la lista es larga. De una u otra forma, tenemos una estructura política y social que está ordenada de una manera desigual, desde el punto de vista del poder.

La participación Latinoamericana en estos grandes circuitos ha sido constante en el último tiempo, es reconocida y vista como heroica, pero el tipo de visualización y presencia es mínimo; se podría decir que ocupa el espacio necesario para generar en las ferias europeas el perfil de inclusivo, heterogéneo, globalizado. Los artistas en Latinoamérica se terminan cansando de viajar, aprovechan el prestigio de haber estado cerca de esos lugares y capitalizan este esfuerzo al volver a sus países. Pero todos soñamos con un circuito Latinoamericano, que la Joyería Contemporánea sea también un esfuerzo sustentable.

Para sintetizar toda esta visión crítica, podríamos decir que la estructura funciona aún bajo un concepto que ha sido revisado en profundidad por destacados pensadores: el “Post-colonialismo”. Estamos condenados a estar siempre en un segundo lugar, otros tienden a hablar por nosotros, la autonomía y el orgullo latinoamericano desde el punto de vista simbólicos parecen una utopía, pero se avanza; se avanza y la Bienal Latinoamericana de Joyería Contemporánea es un ejemplo de eso.


EL DESAFÍO.

Reflexionar sobre lo local y lo Latinoamericano se vuelve, por lo tanto, una tarea pendiente, necesaria, urgente. Crear y pensar desde esta parte del mundo, significa la existencia de una mirada, de un lugar, que se confronta -de cierta manera- a las ideas e imágenes que circulan en Europa. Pensamos nosotros que nuestra subjetividad tiene que irrumpir de alguna forma, debemos buscar maneras de existir. El gran desafío de la Joyería Contemporánea, en este sentido, es el de dar cuenta de este cambio simbólico, los creadores quieren -cada vez con más fuerza- expresar, transmitir y evocar estas subjetividades. La Joyería como Arte se posiciona cada vez más, para responder de manera más profunda a este “cambio de paradigma”.

LA CURATORÍA.

Dentro de este contexto, nosotros como curadores, pensamos este proyecto como una invitación a hacerse cargo de esta “posición socio-política cultural” desde las subjetividades de cada creador. Esta manera de enfrentar la creación es clave, como plantea el crítico cultural Federico Galende “el arte y la política comparten el mismo lugar de origen, comparten las mismas reflexiones, pero la forma en que resuelven son de distinta índole; los artistas lo hacen poéticamente y los políticos, desde lo social, lo político”.

Esta postura respecto a la creación en Joyería Contemporánea, parte de un espíritu común, que nace desde el momento en el que un grupo de creadores, reflexionamos y nos hacemos preguntas, interpelamos a nuestra realidad, comenzamos a dejar de lado la mirada complaciente, la necesidad de aprobación, los “me gusta”, la aceptación del espectador que exclama: “que bello lo que haces”. Esta crisis que trae la tensión de la relación con los espectadores viene a romper el círculo de la relación cliente y artífice joyero, sistema que mantiene a los creadores atrapados bajo la lógica de mercado y circulación simbólica, con pocas posibilidades de cuestionar las producciones de toda índole, o lo que es peor, produciendo lo que Antonio Gramsci llamaba “intelectuales orgánicos”, creadores que funcionan bajo la lógica del poder y el mercado, desplegando en el lenguaje una visión conciliadora y positiva; todo lo contrario a la dura tarea de la investigación y cuestionamiento que conlleva el acto de hacerse preguntas y desarrollar pensamiento crítico.

Estos creadores más conscientes, de los cuales la exhibición es solo un extracto, producen obra en un contexto en el que la discusión sobre la importancia de las técnicas y el oficio de orfebrería pierden protagonismo. De alguna manera, el interrogarse por lo Latinoamericano, inevitablemente, desemboca en preguntas sobre los medios, materialidades, técnicas, procedimientos, circulación, textualidad y todo lo que involucra esta manera de ver la creación desde “lo poético”. Se produce un fenómeno de sublevación y liberación respecto al oficio tradicional de joyería, estos creadores despliegan su propia factura y manera de hacer “objetos poéticos”, misteriosos, incómodos incluso y difíciles de clasificar. De allí su cercanía al arte; no es posible, desde esta perspectiva, reducir el conflicto central de la Joyería Contemporánea a una factura impecable. Como dijo Kapoor en una entrevista respecto a la experiencia con el arte, una muy buena respuesta y lugar para el espectador es el momento de “no entender”. Es en ese lugar, indeterminado e incómodo, en donde comienza a desarrollarse la experiencia estética más activa y transformadora.


LA CONVOCATORIA.

El método para convocar fue mediante una reflexión sobre lo Latinoamericano, planteamos imágenes e ideas que consideramos abordan conceptos centrales que componen la identidad que se habita desde este lugar del mundo.

“La Orfandad”, personificada en creadores como Pedro Lemebel (Chile) y Reinaldo Arenas (Cuba), artistas que por su escritura, procedencia y orientación sexual, tuvieron que luchar contra la discriminación, persecución, abusos, desconsideraciones y desprecios de toda índole.

“La Mitomanía”, encarnada en obras de la dupla de cineastas Raúl Ruiz-Valeria Sarmiento (Chile) y Gabriel García Márquez (Colombia), creadores que desarrollaron el arte de contar relatos e inventar mitos para hacer lugar a las historias latinoamericanas en un contexto de profunda ausencia de redes e instituciones (en ambos casos, tuvieron que escapar de dictaduras, vivir en el exilio, funcionar en tiempos en donde no había visibilidad para subjetividades así).

“La Cleptomanía”, representada en el artista Gonzalo Díaz (Chile), quien plantea que toda su obra es un robo, un “pegoteo” de ideas e imágenes de otros y Jorge Luis Borges (Argentina), donde confluye un océano de referencias y culturas.

“Lo Heterogéneo”, simbolizado en las figuras de la escritora Diamela Eltit (Chile) -en cuyo quehacer confluyen las voces más diversas de los marginados- y el artista Carlos Leppe (Chile) -dedicado a romper cánones del arte y de identidad sexual- quienes en su obra abrieron la mirada de un arte que estaba proscrito en dictadura.

“El Heroísmo Delirante”, concentrado en la figura del Quijote como obra clave para la lengua española y que anticipa esta subjetividad de lo que es el arte latinoamericano plagado de “héroes trágicos”, con sistemas políticos y utopías que cada cierto tiempo se desarman, se caen y se vuelven a caer.

Para nosotros, estos elementos caracterizan lo Latinoamericano y los convocados -de una u otra manera- interpretaron y se sintieron identificados por estas ideas-imágenes. La invitación finalmente fue el comienzo de una conversación que no ha parado y donde la muestra es solo la materialización de estas reflexiones. Nos hicimos cargo de esta identidad, pero no desde la idealización o la instalación de una “marca latinoamerica” (el camino usual), si no más bien, desde el gesto de adentrarnos en el lado oscuro, en lo que arrastramos, eso que nos cuesta ver.

LA TRADICIÓN LATINOAMERICANA.

Una interrogante que usualmente nos planteábamos y que al día de hoy nos seguimos cuestionando es: ¿por qué existe esta dificultad tan grande para instalar una voz Latinoamericana? ¿Por qué pareciera que hay mucho que decir, pero cuesta encontrar interlocutores y espacios? Existe una sensación de que no hay gente que mire para este lado, que entienda, se sienta cercano a estas realidades. ¿Por qué figuras como Joaquín Torres García, Carlos Cruz Diez y tantas otras se encuentran, hasta el día de hoy, tan invisibilizadas?

Junto con las reflexiones de la convocatoria, las conversaciones e investigaciones sobre “lo latinoamericano” han crecido y derivaron en un acercamiento profundo con nuestros principales referentes, revisiones muy productivas y gratificantes para cada creador; esto es lo que llamamos una re-conexión con nuestra tradición latinoamericana. Entrelazarse con esta historia de sublevaciones y tomas de conciencia se hace fundamental, pensamos nosotros. Así mismo sucede con la necesidad de romper definitivamente con la noción de adorno y a partir de ese punto, comenzar una búsqueda para construir el concepto de identidad y a través de ella, despojarse de esa idea de una Latinoamérica de “la historia única”, en la que caben los clichés y estereotipos que maneja el gran público. Dejar atrás esa imagen que circula en medios en la que observamos ese insistente intento de hacer de Latinoamérica una imagen corporativa, un producto para ofrecer al mundo, una imagen como marca. Estos creadores, por el contrario, responden a la búsqueda, interpelan al espectador y lo invitan a que se involucre, experimente y cuestione sus propias ideas e impresiones de lo que entiende por “Latinoamérica”.

LA POST-DICTADURA EN PAÍSES DE LATINOAMÉRICA.

Como idea final, queríamos cerrar estas reflexiones y trabajo objetual en torno a lo Latinoamericano, haciendo hincapié en que esta manera de ver a la creación y a Latinoamérica se conectan de forma profunda con nuestra historia político-social. Estos artistas, de maneras diversas, tienen claro que toda obra aborda una manera de enfrentar “lo político” desde la subjetividad y que ya no es posible pensar la creación en términos superficiales. Es justamente aquí en donde se juega la resistencia de lo que somos como identidad. Ver a la joyería como adorno no tiene que ver con el arte. La urgencia subjetiva se hace aquí mucho más fuerte, justamente, por esta estructura político-social de post-colonialismo presente en el territorio que hoy habitamos.

Los creadores de mayor edad del grupo crecieron en dictaduras, ya sea en Argentina, Chile o Brasil, la situación fue transversal. Hoy se sabe, con toda, certeza que esto no fue casual y corresponde a uno de los tantos capítulos oscuros de la guerra fría. Los más jóvenes vivieron esa eterna transición que ha significado la vuelta a la democracia y los conflictos de gobernabilidad que todo esto implica. En ese sentido, la post-dictadura es un concepto que nos atraviesa, nos define y la manera en que la afrontamos se ve reflejada en las obras, las propuestas, las reflexiones. Estos procesos determinarán el “cómo nos hacemos cargo de nuestra herencia”, y “lo que seremos”. Sergio Rojas (filósofo chileno), plantea que el golpe militar en Chile es un acontecimiento que no termina nunca de suceder. No hay acuerdos en como ver e interpretar la realidad; detrás de muchos sucesos como el último estallido social (que ha terminado por extenderse en toda Latinoamérica) se asoman las raíces de todo lo que sucedió y que hoy sigue sucediendo. Vivimos una democracia plagada de pactos de silencio y la labor de los artistas es la de romper estos paradigmas y buscar nuevas maneras de existir. Estas sensibilidades desplegadas en las obras, importan; son fundamentales, son nuestro patrimonio sensible, son todo aquello que nos hace más humanos.

“Mis reflexiones y angustias giraban entonces en torno a la necesidad imperiosa de entrar en la historia para salvarnos del olvido. No para salvarme yo como individuo, ni para obtener esa notoriedad y fama que buscan a veces los jóvenes artistas, sino para salvarnos todos del contexto en que vivíamos. Integrarnos al tiempo, al tiempo de nuestro tiempo y decirle al mundo: aquí estamos… existimos… aquí también suceden cosas”… Carlos Cruz-Diez, artista venezolano.

Caco Honorato y Mariela Vicencio.

Estudio Honorato+Vicencio para "Poéticas Latinoamericanas... la Joyería Contemporánea y su tránsito a dispositivo cultural”

Actividades

Lorena Jarpa / 'Término Impropio'

"TÉRMINO IMPROPIO"

América Latina se me presenta caótica, continente en permanente tensión y desfasado por un frecuente conflicto entre lo histórico - político - social, en contradicción con la apertura que implican el Arte y la Literatura. Aquellas manifestaciones honestas y desprovistas de tecnicismos, asfixiadas deben emigrar para poder ser comprendidas y valoradas. En mi proceso creativo para la serie “Término Impropio” incorporo elementos planteados por poetas, escritores, artistas, filósofos latinoamericanos y otros europeos, que aclaran mi lectura de lo que es la “latinoamericanidad” llena de contrastes, en permanente desplazamiento y diacronías. En estos autores encuentro las directrices para despertar el lenguaje formal que conjuga vaivenes. Rituales azarosos que combinan opuestos constituyendo un entramado de posibilidades, llevándome a tomar el material en obsolescencia.

Rompo la estructura del tejido, lo expando, lo estiro y lo tuerzo, para configurar algo diferente y nuevo. Destruir para construir desde las leyes del azar, “el caos es ausencia de formas y el medio para crearlas”.

Patricia Iglesias / 'Ensayo y Error'

"ENSAYO Y ERROR"

"En el centro profundo del mundo, algo espera, eso que está hecho del aumento de lo que permanece inaprehensible”. Federico Galende.

En esta serie de piezas exploro la noción de acontecimiento, enlazada a aquellas etapas de la vida que se vinculan con la línea de tiempo y que son experimentadas por los seres humanos; lo distinto es el lugar desde donde las vivenciamos, cuando el territorio influye en la idea de identidad que se adopta o se construye.

Abordo mi trabajo desarrollando las piezas a través de una estética bastarda, abarcando la idea de improvisación y de resolver en el camino, como suele ser el acontecer latinoamericano.

En mi obra confronto materiales gestando un diálogo entre ellos y las conexiones subjetivas de conceptos e imaginario. Es el lenguaje que uso para construir mis piezas de manera intuitiva.

Divido la cronología en tres tiempos: Acuerdo, Herencia y Desapego; cada tiempo está encadenado a las normas de crianza que recibimos para convertirnos en “buenas mujeres”. Parafraseo a Virginia Cano cuando dice que hemos sido entrenadas para ser indefensas, frágiles, sumisas, gentiles, poco confrontativas, componedoras e inclusivas.

Para integrar estos conceptos, recurro a materiales de diverso origen y a diversas técnicas téxtiles, buscando formas provocadoras e inquietantes, albergando lo inaprehensible.

Joana Gabos / 'Desigualdades Territoriales'

"DESIGUALDADES TERRITORIALES"

Hablar sobre la identidad latinoamericana y sus poéticas es para mi, de alguna manera, hablar sobre las desigualdades a las que esos territorios han sido sometidos a lo largo de estos años. Desigualdades que conducen a una repetición de padrones polarizados en la forma de habitar y vivir.

La presión con que la sociedad contemporánea es empujada, principalmente de los grandes núcleos urbanos, ha llevado a la situación de extrema pobreza. Actualmente, numerosas familias son obligadas a ocupar áreas inadecuadas, en una tentativa desesperada por la sobrevivencia cuando la autoconstrucción se presenta como una salida viable para obtener una morada. En el caso de Brasil, esta desigualdad socio-territorial es claramente percibida en las características de las habitaciones familiares de las favelas, en su mayoría, autoconstruidas.

El punto de partida de la construcción de una casa es la recogida de la materia prima: sobras y basura de las otras construcciones, una recomposición de los fragmentos encontrados al acaso.   

Esta metodología constructiva va más allá de una cuestión estética, es una condición de sobrevivencia: no sólo física, también comunitaria y cultural. Son manifestaciones de urgencia concreta. A una mirada generalista le puede parecer caótico, pero en una observación más profunda, es posible ver una gran capacidad creativa para la improvisación de los recursos materiales y económicos disponibles.

Traducción de texto: Laura Mallozi.

Daniela Rivera / 'Punctum'

"PUNCTUM"

El sufrimiento de Latinoamérica, la violencia histórica y la actual, una sociedad quebrada que vivió abusos sistemáticos sin verlos. Un sufrimiento que nace desde la explotación del ser productivo, del sistema del “Hombre económico” y del "rendimiento sin alma” como diría Gastón Soublette.

La obra se comunica desde la violencia, el dolor, la injusticia. Se mueve en emociones que van desde una memoria histórica de abusos a una experiencia contemporánea de violencia normalizada.

Estos conceptos se expresan mediante una contraposición entre lo aparente y lo que emerge desde lo profundo. Objetos con un alma en tensión que evocan un vestigio humano fracturado resistiendo a su extinción y brotando capa sobre capa, donde cada capa tiene su propia historia. Superficies que ocultan un interior constreñido, ardiente. Las huellas de lo humano que se borran y quedan en misterio. Materialidades que evocan lo inerte oponiéndose al tejido humano vital. Piezas que tienen un peso físico y visual, con reminiscencia de algo que fue y ya no es, algo que dejó de ser para transformarse en otra cosa. Son piezas que terminan de significarse en el cuerpo, molestan, arrastran ese dolor y evidencian ese sufrimiento.

Marita Sario / 'Barbarie - Civilización: La piel de América'

"Barbarie - Civilización: La Piel de América".

“Así nace esta América dual, ante todos los que solo reconocen la América europea y caen en ese vacío de sentido" (Rodolfo Kusch).

Mis piezas para este proyecto nacen de dos palabras. Civilización y Barbarie. Conceptos que se plasman en la pluma de Sarmiento donde este autor observa una fuerza SEDUCTORA en la BARBARIE, pero como constructor de una época y proyecto de país toma partido rotundamente absolutista por la primera.

Y así venimos, dando tumbos y mirando afuera todo lo que no tenemos adentro y CONSTRUIMOS UN DESEO COLONIZADO Y FALSO, porque acá esas formas no se adaptan, nuestra realidad es otra, desde la geografía, la cultura, la forma de ser y la constitución humana. Hasta el uso de la lengua castellana nos es propio. Todo esto formando la geocultura en la que estamos.

El horizonte entonces se repliega y nunca conseguimos claridad necesaria para sentir lo que somos con sinceridad, sin miedos ni vergüenzas.

Estudio Honorato+Vicencio / 'De Vuelta al Sur'

“DE VUELTA AL SUR... 

Entramando mapas para no extraviarse”.

A nuestros ojos, “lo latinoamericano como subjetividad es central”. Estas piezas son un misterio, el enigma de su existencia es algo que se está por resolver.

La “vuelta al sur” es la metáfora que nos sitúa en un territorio simbólico e histórico en el que las piezas son el sustento para re-conectarnos con poéticas relacionadas con el habitar esta parte del mundo. Poetas y escritores han sido convocados aquí, por medio de textos y citas que se entrelazan con las imágenes evocadas; la obra no es el conjunto de piezas resultantes, sino, la experiencia total de los distintos elementos que la componen y los entramados que se generan entre ellos.

Estas frágiles piezas modeladas en greda, puñados de tierra antropomórfica cargada aún de petricor, se re-visten de múltiples capas de tejido en lana ordinaria, para perseguir un acercamiento al origen bastardo de la esencia latinoamericana, a medio camino entre el mundo civilizado y una naturaleza indomable. Estas piezas son la metáfora de una resistencia, la búsqueda de un camino que nos guíe de regreso al sur... una vuelta al deseo de encontrarse con la esencia de todo aquello que nos compone como vivos puñados de tierra nuestra.


“En el país de la memoria somos hijos de los hijos,

la herida que duele, la herida que se abre, 

la herida que sangra hacia la tierra”… Elicura Chihuailaf.


Caco Honorato y Mariela Vicencio. 

Estudio Honorato+Vicencio.

Participantes

Daniela Rivera Arancibia / Estudio Honorato+Vicencio / Joana Gabos / Lorena Jarpa Leal / Marita Sario / Patricia Iglesias Scepanovic